Todas las bombillas que necesitas en un solo lugar:
El planeta de la luminosidad ha evolucionado mucho en los últimos tiempos. Han pasado de emplearse unos tipos de lámparas a usarse otros que ahorran más energía y duran mucho más tiempo, como las luces led. Además, también debes tener en cuenta muchos otros requerimientos a fin de que elijar las bombillas correctas a tu espacio. Prosigue leyendo si estás interesado en Lámparas recargables con el sol.
Comprar nuevas luces puede resultar aburrido si no pones en práctica los consejos que te detallamos seguidamente.
Hay dos componentes básicos que resaltan de primeras en el instante de comenzar a comprar las luces. El más habitual es tener en cuenta la potencia, que hace referencia a la energía que va a emplear. Pero desde hace un tiempo, se prioriza más la cantidad de lúmenes, pues se refiere a cuánta luz dará dicha luz, que al final es más prioritario.
Para facilitarte un tanto las cosas, te dejamos unos fáciles datos de equivalencia aproximada:
Si buscas bombillas de 100 vatios, deberías adquirir una que tenga mil seiscientos lúmenes. Si prefieres de setenta y cinco vatios, su equivalente va a ser la de mil cien lúmenes. Para una potencia de sesenta vatios, tendrás que decantarte por bombillas de 800 lúmenes. Para finalizar, para una lámpara de baja potencia de 40 vatios, deberías obtener una de 450 lúmenes.
Luego asimismo tienes que tener en cuenta que hay luces que tienen menos vatios, mas posibilitan más lúmenes, con lo que la cantidad de luz será considerablemente mayor a menor potencia. Es el caso de muchas lámparas led que, a su vez, ahorra energía.
El color y el brillo son dos fundamentos imprescindible en la elección de lámparas
Como el número de lúmenes va a determinar la cantidad de luz que dará la bombilla que compres, has de optar por el tipo de lámpara que mejor se adapte a la luminosidad que requiera tu lugar. Porque si te interesa mucha luz, entonces tendrás que adquirir una de 1.600 lúmenes, mientras que para una iluminación media, te puedes conformar con ochocientos lúmenes. En el mercado hay un amplio abanico de posibilidades, y aquí te vamos a mostrar todas.
El color de la luz que dé la lámpara es otro matiz elemental en tu compra. Es posible que el resto de componentes los elijas apropiadamente, mas si te decides por un color de luz que no te agrada, todo lo demás va a quedar inútil. De ahí que, debes regirte por los grados Kelvin. Así, puedes decantarse por una luz un tanto azulada (5.000-6.000K), una luz más blanca y neutra (tres mil quinientos-4.000K), una luminosidad cálida (tres mil-3.200K) o una luz amarilla (dos mil setecientos-2.800K). A fin de que tu compra sea lo más completa posible, aquí vas a encontrar todo lo preciso.
Existen luces inteligentes, poco a poco más demandadas, que dan la posibilidad de poder hacerte con múltiples modos de luz y tonalidades a fin de que no te tengas que decantar por una luz cálida o bien fría únicamente. Por eso, estas compras son muy eficaces en tanto que te dan más opciones alternativas cromáticas.
Se trata de unas bombilla que dan una luz que tiende a ser azul. Es una elección sobre todo si no te agradan los tonos naranjas o amarillos. Las luces halógenas generan una luz bastante brillante, pero es posible que las luces se quemen muy rápido. Son muy empleadas para alumbrar electrodomésticos, raíles o para las lámparas de escritorio. Las puedes localizar por diversos costos.
Al final, se trata asimismo de bombillas con bastante buen rendimiento, porque ahorran energía, teniendo una potencia menor, y son más eficientes que otras habituales. En el mercado tenemos halógenos variadísimos que se amoldan a tu presupuesto marcado.
Cuando empleamos bombillas fluorescentes compactas, ahorramos se produce un notable ahorro de energía. También son popularmente conocidas como luces de bajo consumo y sustituyen perfectamente a las incandescentes habituales y ya obsoletas. Estas lámparas acostumbran a ser realmente débiles a temperaturas externas, con lo que debes observar que no se calienten en demasía. Te recomendamos no apagar y encender constantemente por el hecho de que, aparte de perdurar más, gastarás menos.
En cuanto a su uso, estas luces son comunes para lámparas de escritorio, lámparas de pie, lámparas de mesa o tiras lineales y apliques. Los precios suelen estar a partir de los dos-3 euros.
Te aconsejamos adquirir bombillas led como la alternativa estándar de bajo consumo. Esta clase de luces son las más populares. Otro beneficio es que duran más que el resto de luces, hasta 20 años. En el mercado puedes hallar un extenso abanico de color y apariencias, con lo que no tendrías inconvenientes para decidirte por una u otra.
La vida útil de una luminosidad led puede oscilar entre las 20.000 y las cincuenta horas, con lo que, si bien el coste sea tenuemente superior a otros géneros de bombillas, su mayor resistencia hace que lo amortices pronto. Por otro lado, son muy versátiles y las puedes poner en todo género de entornos. Si estás interesado en adquirir led, hay numerosas marcas que proponen un gran abanico de opciones.
Un paso más allá de las luces LED básicas, hallamos estos dispositivos inteligentes que se pueden manejar a través del móvil o bien el PC, conectados por BlueTooth o Wi-Fi. Son capaces de regular la temperatura de luz o bajarla y subirla, en función de las necesidades. Requieren un mayor presupuesto inicial, aunque también a la larga proporcionan mayor comodidad. Puedes comprarlas de marcas tan variadas como Xiaomi o Trust con unos costos a partir de 15 euros en adelante.
Lámparas recargables con el sol
Al hilo de lo que explicábamos en ciertos puntos de la página, puedes adquirir asimismo bombillas que sean regulables para poder rebajar la luz, por ahorro o bien por crear un ambiente más íntimo cuando sea requerido.
Por último, otro aspecto a tener en cuenta a la hora de decantarte por un tipo o bien otro de luz es el lugar donde lo vas a colocar. No es exactamente lo mismo una luminosidad para un jardín que para un dormitorio. También debemos tomar en consideración el tipo de lámpara que usaremos, pues no todas las luces resisten igual el calor en artefactos cerrados. Las LED, por servirnos de un ejemplo, son débiles a las elevadas temperaturas.
Y esto es todo sobre Lámparas recargables con el sol
